CON CUANTA ALEGRÍA DESEABA LA VENIDA DE MI HIJO JESÚS AL MUNDO

 Mensaje de la Siempre Virgen María de Guadalupe para el Mundo a través de la Vidente y Profeta del final de los tiempos María de la Cruz en el Cenaculo de Oración por la salvacion de las almas "La Sagrada Familia"

 11 DE DICIEMBRE DE 2012

09:00 HRS.

Con cuanta alegría deseaba la venida de Mi Hijo JESÚS al mundo:

Mis deseos crecían cuanto más se acercaba el tiempo de la Encarnación de Mi Hijo Jesús, inspirándomelos el Espíritu Santo, cuya propiedad es, cuando quiere conceder alguna cosa a los escogidos, y fueron inspiraciones vivas de Mi gran deseo, porque que con el deseo y la oración Me dispuse a recibirle.

Solicitábale también caridad, con dos nobilísimos actos:

1.- El amor de Dios y del prójimo, celo de la Gloria de Dios.

2.- El de la salvación de las almas.

Porque como siempre he amado tanto a Dios Padre del Cielo, deseaba con todo Mi corazón verle ya hecho Hombre, para conocer más Sus grandezas y ver Sus Obras maravillosas, y conservarme con Él familiarmente.

MARÍA.- Diría como aquello de los cantares (8, 1,2) “¿QUIEN ME DIESE, HERMANO MIO, QUE TE VIESE YO A LOS PECHOS DE MI MADRE, PARA QUE TE HALLE FUERA Y TE BESE Y NINGUNO ME DESPRECIE?

JESÚS.- Y… después escuche una voz que Me dijo: “TE ASIRÉ Y TE ENTRARÉ EN LA CASA DE MI MADRE, Y EN EL RETRETE DE LA QUE ME ENGENDRÓ, ALLÍ ME ENSEÑARÁS Y YO TE DARÉ A BEBER VINO ESCOGIDO Y ZUMO DE MIS GRANADAS”

MARÍA.- ¡Oh quién fuese tan dichosa que te viese ya hecho hombre, mamando de los pechos de alguna mujer y te hallase fuera de ese cielo, conversando visiblemente con los hombres de la tierra, para que Yo te diese beso de paz y le recibiese de Ti!; y entonces procuraría conversar Contigo y oír Tu doctrina en este Templo y convidarte con lo que mucho deseas., dándote todo Mi amor con muchos afectos y obras de caridad.

Al paso del tiempo he ido juntando en mis entrañas, con mucho celo las ofensas que le han hecho a Dios, y en Mi Corazón la perdición de los hombres, hay como me duele, y clamo con grandes gemidos y oraciones pidiendo y suplicando a Dios del Cielo que viniese a remediarlos.

Os digo pequeña niña, María de la Cruz, que, repetiría con grande afecto las oraciones de David y de Israel, de que usa la Santa Iglesia en el Adviento, diciendo a Dios “DESPIERTA, SEÑOR, TU POTENCIA Y VEN PARA HACERNOS SALVOS” (PS. 79, 3) Y “MUESTRANOS TU MISERICORDIA Y DANOS TU SALVADOR” (Ps. 84, 8), “¡OH SI ROMPIESEIS LOS CIELOS Y VINIESES!” (Is. 64, 1), “ENVIAD, CIELOS, VUESTRO ROCIO Y NUBES, LLOVED AL JUSTO, ABRETE, OH TIERRA Y BROTA AL SALVADOR” (Is., 45, 8).

Quiero deciros pequeños Míos, hijitos de Mi Corazón, es tan poderosa la oración, sobre todo cuanto Estoy contemplando a Mi Hijo Jesús, que cuando oro con los hombres, porque está tan perdido el mundo y han sido muchos inmerecedores de recibir esta merced.

Pero Yo misma me compuse a los deméritos de todos y con sus merecimientos y oraciones, porque fue parte de que Jesús, el Hijo de Dios Padre Yahvé, apresurase Su Encarnación sin hacer caso de la dignidad del mundo.

Preparad pues Hitos Míos su corazón, en este tiempo de Adviento, para recibir de nuevo en su corazón como si volviera a nacer en Ustedes vuestro Señor Jesucristo. Amén.

Preparadse aquellos incrédulos, pues el Rey de Reyes volverá pronto a Ustedes y bajará del Cielo rodeado de Ángeles con gran Majestad y Soberanía; y lo verán los ojos  de todo aquel que ha creído en las Revelaciones en las Profecías, de los Profetas antiguos y actuales. Amén.

Os bendigo, Su Madre María, en la Advocación de Guadalupe.

 + En el Nombre del Padre Yavé

+ En el Nombre de Mi Hijo Jesucristo 

+ En el Nombre del Santo Espíritu de Dios Paráclito

+ En Mi Nombre, María de Guadalupe.

Amén, Amén, Amén.

FUENTE:WWW.EJERCITOMARIANO.COM